El nuevo terreno de disputa del mercado serán las pickups del estilo de la Fiat Toro: a Oroch se sumará la Ford Maverick, VW Tarok y, al parecer, la nueva generación de la Chevrolet Montana.
Hace algo más de un mes, la planta pernambucana de FCA vio salir por sus portones a la unidad 300 mil de la pickup Toro, que se produce desde 2016. Es un número imponente para la industria en esta parte del mundo, superior a muchas pickups del segmento más vendido por aquí, el de camionetas de «una tonelada», como Hilux, Ranger o Amarok.
A diferencia de éstas, la Toro y la Renault Oroch (de números globales más modestos) están construidas con carrocería autoportante y no con chasis de largueros que unen una cabina y una caja. Por esta característica, no tienen la robustez de sus hermanas mayores, pero sí un andar mucho más suave y parecido al de un auto. Para uso recreativo y de trabajo liviano resultaron un golazo para el cliente sudamericano.
El número de arriba alcanza como argumento para que el resto de las marcas no dejen solas a Fiat y Renault. La que más cerca está es Ford, cuya estrategia de centrarse en SUVs y pickups necesita avanzar sobre nuevos segmentos. La Maverick ya es una realidad aunque no esté confirmada y llegará entre el año que viene y 2022..
Volkswagen ya debería estar jugando en el segmento con la Tarok que mostró como concept en el Salón de San Pablo 2018. Lista para producción, se quedó sin el ok final por problemas internos y la crisis creada por el coronavirus. Sin embargo, su futuro podría concretarse en Argentina en 2022.
Nueva Montana (o como se llame)
A nivel mundial hay una fuerte sospecha que la Chevrolet Montana, una pickup chica que compite con Fiat Strada y VW Saveiro, podría crecer en su segunda generación y pasar a competir directamente con los productos mencionados más arriba. Lo del nombre es lo de menos, podría seguir llamándose así o no.
Esta nueva Montana se construirá sobre la moderna plataforma GEM de General Motors, la misma de toda la nueva familia de productos del segmento B como Onix, Onix Plus y Tracker, pero con dimensiones ampliadas. Particularmente, se menciona al SUV (plataforma GEM 2) como modelo base desde el que montaría la pickup.
Según algunos periodistas de Brasil, el posicionamiento será suficientemente amplio como para no dejar de lado a los clientes actuales de Montana, que en ese país todavía se vende aunque con números bajos. Por eso, podría tener variantes con cabina simple, a diferencia de Toro y Oroch.
El sitio especializado GM Authority, en tanto, señala que el motor principal para este proyecto es el 1.4 turbo del Cruze, que se hace en Rosario, con 150 CV. Si la gama es amplia, habría que pensar también en la variante turbo del motor 1.2 del Onix de entrada de gama.
El lugar de producción debería ser la misma planta paulista donde se hace la Montana actual, aunque por qué no pensar en la posibilidad de producción en Argentina, teniendo en cuenta que es altamente probable que la Tracker se produzca también acá.
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