Ahora es oficial: se presentó la nueva pickup de Jeep, llamada Gladiator, que se basa en el nuevo Wrangler. Como las camionetas son consideradas vehículos de trabajo, no pagan impuestos internos a los autos.
Filtrado antes de fecha, ya conocíamos el aspecto de nuevo Jeep Gladiator (¿o habrá que decir la Jeep Gladiator?) pero ahora toda la información es oficial, luego de su presentación en el Salón de Los Angeles. Se trata de la nueva pickup todoterreno más picante del planeta, que usa un nombre con gran reminiscencia aquí en Córdoba.
El Jeep Gladiator usa como base el nuevo Wrangler que, por si no se enteraron, se presentó hace unos meses y no es el mismo que actualmente se vende en Argentina, aunque es muy parecido. La pickup usa la misma plataforma pero es un poquito más larga y tiene mayor distancia entre ejes.
Jeep presume de que la nueva Gladiator es la pickup mediana más capaz de la historia y es difícil decirle que no, ya que el Wrangler es, sin dudas, uno de los vehículos todoterreno de venta general más capaz del mundo. Tiene chasis de largueros de acero ligero y suspensión de cinco brazos en el eje trasero, de diseño exclusivo para la pickups. Según Jeep, además de capacidad off-road, el Gladiator tiene buen confort de marcha.
Cuenta en su oferta con dos sistemas de tracción total diferentes. El Command-Trac 4×4 de serie en Sport y Overland, incluye una caja de transferencia de dos velocidades y una reductora (2.71:1), además de ejes Dana 44 (relación 3.73).
Por su parte, el llamado Rock-Trac 4×4 también lleva ejes Dana 44 pero de tercera generación (relación 4:1) con diferenciales de bloqueo electrónico Tru-Lok. El diferencial autoblocante trasero de bloqueo electrónico es opcional en Sport y Overland.
El Rubicón, además, ofrece una mayor articulación y recorrido de la suspensión gracias a una barra estabilizadora desconectable, así como paragolpes de acero, neumáticos todoterreno de grandes dimensiones o un cabestrante delantero de acero.
Los motores anunciados son dos. En una primera instancia estará disponible el conocido 3.6 litros Pentastar V6 naftero (del que se han fabricado nada menos que 8,6 millones de unidades desde su nacimiento en 2010) y a partir de 2020 también un 3.0 litros EcoDiesel V6.
El Pentastar ofrece una potencia de 289 CV y un par motor máximo de 353 Nm, aunque Jeep asegura que está optimizado para ofrecer una gran cantidad de par a bajas vueltas, algo necesario para el off-road «extremo». De serie se asociará a una caja de cambios manual de seis marchas y en opción habrá una automática de ocho relaciones.
El futuro turbodiésel 3.0 litros V6 tendrá una potencia de 264 CV y un muy generoso par máximo de 599 Nm. Como el naftero, incorpora de serie el Start/Stop, aunque en este caso la transmisión automática de ocho marchas será de serie, debido a la mayor cifra de par motor.
Como ya es una clásico el parabrisas es abatible, las puertas de aluminio también se pueden extraer mediante un kit de herramientas Torx y lo mismo para el techo, que puede ser de lona. Todo el habitáculo está inspirado en la historia de la marca, con un toque retro, aunque con todas las funciones modernas de climatización, conectividad (hay dos puertos USB y un USB-C), molduras decorativas de metal, arranque por botón, asientos tapizados en tela o cuero (opcionalmente calefaccionados, al igual que el volante) y demás.
El cuadro de instrumentos puede ser digital en opción (TFT de 7 pulgadas) y la pantalla multimedia ofrece dos tamaños, 7 u 8,4 pulgadas, además del sistema Uconnect de cuarta generación (compatible con Apple CarPlay y Android Auto). En las versiones Sport también es de serie otra pantalla táctil inferior de 5 pulgadas para el control del clima y funciones de audio, mientras que los Rubicon traen una cámara delantera.
Además los asientos traseros son abatibles y hay múltiples huecos portaobjetos, incluido un compartimento con llave o un compartimento bajo los asientos para guardar los tornillos de las puertas al desmontarlas.
La caja de carga, de hasta 1,5 metros de largo, tiene un suelo de acero, iluminación, un montón de accesorios para asegurar o cubrir la carga y, opcionalmente, una toma de corriente protegida mediante una cubierta (115 voltios) o una rueda de repuesto del mismo tamaño que las normales ubicada bajo el cajón, tras el eje trasero. Además, el portón tiene tres posiciones -ya que cuenta con amortiguadores- y se puede bloquear una vez cerrada.
Sin impuestos internos
FCA por el momento no confirmó la llegada del Jeep Gladiator, pero no hay motivos para suponer que no lo vaya a traer, aunque seguramente no será el año que viene. Se fabrica en Ohio, Estados Unidos, y como tal pagaría en Argentina 35% de aranceles extra zona.
Sin embargo, a diferencia del Wrangler, no pagaría impuestos internos a los autos, ya que al ser una camioneta se considera un vehículo comercial. Sin dudas el Gladiator tendrá un público de nicho pero más que interesante en nuestro país.
Seguinos en Facebook o Twitter.
Para recibir más novedades de este tema te podés suscribir por mail a nuestro boletín gratuito.