El nuevo Renault Kwid, que llega en noviembre a Argentina, está haciendo una revolución en Brasil. Gracias a su bajo precio, en septiembre vendió más unidades que todo el resto de la marca Renault.
Kwid, el benjamín de la familia Renault, viene realizando verdaderas proezas en Brasil, un mercado en el que la marca francesa nunca pudo hacer pie del todo. Presentado con un precio que rompía el piso simbólico de los 30 mil reales (algo así como 166 mil pesos argentinos), la gente compró el Kwid sin siquiera conocerlo, durante una preventa.
En septiembre llegaron a las calles las unidades reservadas y le rompió la balanza a Renault: fue el segundo auto más vendido de Brasil, con 10.358 ventas mensuales, detrás del Chevrolet Onix. El dato más curioso es que si Kwid fuese una marca de autos, vendería más autos que la propia Renault (9.251 unidades de todos los otros productos). Eso no es todo, también le ganaría a Honda, Nissan, Jeep y Peugeot.
De ahí la importancia del Kwid para Renault: tiene que ser el modelo que definitivamente ponga al rombo en la pelea por ser una de las grandes marcas de Brasil, en términos de volumen, algo que nunca pudo lograr hasta ahora.
Renault terminó en el séptimo lugar el primer semestre en el mercado brasileño, con un 7,7% de participación, detrás de General Motors, Fiat, Volkswagen, Ford, Hyundai y Toyota. En cambio, si contamos sólo las ventas de septiembre, Renault trepa hasta el cuarto lugar con un 10,6% de participación.
Por supuesto, este es el resultado de la preventa y es difícil que la marca del rombo mantenga ese ritmo de patentamientos, sobre todo porque la fábrica Ayrton Senna de Curitiba está trabajando a pleno para cubrir al demanda. Y falta poco para que esa planta deba exportar a Argentina.
En nuestro mercado, el Kwid tiene fecha asignada en noviembre y Renault ya lo promociona en su web como «El SUV de los compactos». Es decir, busca posicionarlo como una pequeña camionetita, algo que ya intentó hacer con el Sandero Stepway. Si bien el Kwid no tiene tracción 4×4 ni nada que se le parezca, su despeje del suelo, los buenos ángulos de ataque y salida y la protecciones plásticas en las zonas bajas le dan apariencia aventurera.
El Kwid será, en verdad, la nueva entrada de gama de Renault en Argentina y ocupará el lugar del querido Clio cordobés, que dejó de fabricarse el año pasado. La propuesta es clara: un auto de sólo 3,6 metros de largo, de buen espacio interior, en el que se ha hecho un verdadero trabajo de ingeniería para que sea lo más barato y liviano posible.
Pesa sólo 800 kg y trae un motor de un litro de cilindrada tricilíndrico de 66 caballos de potencia, asociado a una caja manual de cinco marchas y tracción delantera. Se venderá en tres niveles de equipamiento: Life, Zen e Intens, más una tope de gama Iconic, que probablemente se ofrezca en una segunda etapa.
De serie, lo más destacado es que todas las versiones vendrán con 4 airbags, algo que muchos producto de mayor precio no lo ofrecen ni como opcional. Todavía se desconoce qué tan seguro puede ser este Kwid, que según Renault recibió gran cantidad de refuerzos estructurales respecto a su par fabricado en India, al que le fue terriblemente mal.
Fuente: Fenebrave / Quatro Rodas
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