Para Jaime Ardila, Presidente de General Motors para Sudamérica, el mayor problema de Argentina es la devaluación del real. Además cuenta como avanza el Proyecto Fenix.
El colombiano Jaime Ardila asumió como Presidente de General Motors para Sudamérica en el año 2010, luego de ocupar un cargo similar pero para el Mercosur. La semana pasada estuvo en Buenos Aires y habló con el periodista Alejandro Rebossio del diario La Nación. En la nota, Ardila se mostró sorprendido positivamente por la «resistencia» del mercado argentino, preocupado por el impacto en las exportaciones de la devaluación en Brasil y confirmó que el Proyecto Fenix que viene desarrollando GM en Argetnina es un auto global de alta tecnología, lo que prácticamente confirma que se trata del nuevo Cruze.
Pese a la caída que viene mostrando por 15 meses, para Ardila los números actuales del mercado argentino son más realistas que los 950 millones de 2013. «El mercado argentino me sorprendió positivamente por la capacidad de resistencia. Es verdad que llegó a ser un mercado de casi un millón de unidades en algún momento, pero no era un nivel sostenible, considerando la población y el nivel de ingresos. Ahora proyectamos un mercado de cerca de 600.000 unidades, un número razonable para la Argentina.»
Sí, en cambio, ve una amenaza a la industria automotriz argentina en la caída del mercado brasileño. «Me preocupan más las exportaciones. La caída del mercado brasileño fue muy fuerte. Había caído el año pasado cerca de 8 por ciento. Esperábamos que este año fuera un mercado más o menos igual, pero en los últimos tres meses la caída ha sido mucho más fuerte, de cerca de 20 por ciento», indica, y agrega: «Hoy por hoy el mayor problema de la Argentina es la devaluación del real. Esto la coloca en una posición competitiva más difícil. Yo no pensaría si la política cambiaria argentina es correcta o no, sino que miraría alrededor del mundo cuántos desafíos nos crea ese desajuste que ha habido con la revaluación mundial del dólar y la caída del real.»
GM está llevando adelante una inversión en Argentina denominada Proyecto Fenix, que insumirá un total de 740 millones de dólares entre la nueva planta de motores (U$S 270 millones), la adecuación de la planta cercana a Rosario (US$S 20 millones) y el desarrollo de un nuevo vehículo, que nunca ha sido confirmado pero se descuenta que se trata del nuevo Cruze. «La intención es comenzar a producir el próximo año. Los cambios en las plantas para fabricación del vehículo y del motor fueron muy importantes. Se hará un producto de alta tecnología. Es una inversión por encima de 700 millones de dólares», dice Ardila.
Los modelos que actualmente produce GM en Argentina (Classic y Agile,) son destinados únicamente al Mercosur, ya que son autos que no se venden en otros mercados. Pero con el Proyecto Fenix eso cambiará, ya que el Cruze es un auto global. Señala Padila que el cambio de estrategia fue posible «gracias a las plataformas globales de General Motors. Lo que hoy fabricamos en la Argentina no son plataformas globales, con toda la tecnología moderna, no las teníamos disponibles. Hoy las tenemos. Hoy podemos localizar estas plataformas en cualquier país que tenga la capacidad productiva y tecnológica. Es un giro radical en el modelo de negocios.»
Entre otras plantas que ya han sido confirmadas para el nuevo Cruze está la de México, con lo que las posibilidades de exportación del nuevo modelo serán acotadas. Sin embargo Ardila es optimista: «Vamos a ver qué tan competitivos somos, pero mi perspectiva es que podría ir más allá de Brasil».
Finalmente, respecto a Classic y Agile, Ardila indicó que seguirán en producción «mientras tengan demanda en el mercado local».
La entrevista completa puede ser consultada en este link.
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