Se presentó en Brasil el programa «Carro Popular» que da incentivos a la compra de autos, camiones y buses.
El nuevo presidente de Brasil, Lula da Silva, es un viejo aliado de la industria automotriz, ya que viene del gremio metalmecánico. Por eso no sorprende que una de sus más esperadas medidas de comienzo de gobierno sea un programa para reducir el precio de los autos en Brasil.
El programa conocido como «Carro Popular» tiene tres pilares: precios, contaminación y cantidad de piezas locales que tenga cada vehículo. La idea es dar un incentivo mayor a los autos con precios más bajos, que contaminen menos y que tengan un alto porcentaje de piezas producidas en ese país. Este último ítem podría afectar a las exportaciones de Argentina a Brasil.
Carro Popular
El programa tiene un costo fiscal de 1.500 millones de reales (cada real vale 0,2 dólares, por lo que son alrededor de 300 millones de dólares) y será destinado principalmente a la renovación de buses y camiones de más de 20 años de antigüedad, con mil millones de reales. Los restantes 500 millones de reales irán reducciones fiscales destinadas a la compra de autos económicos a consumidores (personas).
La idea es que los autos de hasta 120 mil reales reciban descuentos, con mayor porcentaje a los más baratos y menos contaminantes. El caso testigo son los Renault Kwid y Fiat Mobi, que hoy salen 68.990 reales y que deberían romper el piso de 60 mil reales, unos 12 mil dólares. Otro caso similar sería el del nuevo Citroën C3 (R$ 69.990), pero todavía no tiene la cantidad de piezas locales suficientes.
El comunicado destaca que los autos lanzados al mercado a fines de 2022 tienen una eficiencia energética 12% superior a los de hace 5 años atrás gracias al programa Ruta 2030, que es el que incentiva la compra de autos con motores pequeños y eficientes, así como el uso de etanol y los sistemas híbridos y eléctricos.
El ministro de Industria, Geraldo Alckmin, dijo que los autos como los mencionados anteriormente tendrán un descuento en el concesionario de 8 mil reales, por lo que su precio apenas superaría los 60 mil reales, pero que espera que las automotrices hagan un descuento extra para que el precio baje aún más.
Para los modelos más caros, el descuento será menor. Hoy no todas las automotrices están en condiciones de plegarse al programa, porque muchas han abandonado los autos de segmento inferior, como es el caso de Ford, que se ha centrado en SUVs y camionetas.
El programa tendrá la duración que agote el monto previsto y podría o no ser renovado.
Cómo afectará a Argentina
Resta conocer cómo este programa afectará a Argentina, porque nuestro país exporta autopartes y autos a Brasil, modelos que no podrán entrar en los descuentos. Particularmente podría afectar a el Peugeot 208 y al Fiat Cronos, dos modelos que han repuntado mucho en sus ventas en ese país.
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