Honda presentó a nievo mundial el nuevo Fit, también conocido como Jazz en otros mercado. Sorprende con su diseño más minimalista sin perder su esencia: un auto pequeño y amplio por dentro. Será híbrido.
Hay autos que, sin ser los más vendidos, tienen sus fanáticos en todo el mundo y no defraudan de generación en generación. Tal es el caso del nuevo Fit (o Jazz) que acaba de ser presentado en el Salón de Tokio y que renueva su imagen sin cambiar su esencia: una auto pequeño y funcional, con aires bien familiares.
Honda viene dejando ver una nueva tendencia a partir del modelo e (ver más), con una propuesta retro chic minimalista, pensada seguramente para un público joven urbano que ya no valora tantos cromados y decorados. En esa misma línea -al menos así lo vemos desde acá- va el nuevo Fit.
Líneas sencillas y amplia superficie vidriada (al estilo de los familiares franceses de hace unos años), remarcada gracias al uso de pintura negra. En este sentido, hay una nueva versión aventurera llamada Crosstar, que tiene otra parrilla y techo bicolor, además de algunos detalles plásticos en los zócalos.
Este minimalismo se nota más en el interior, con una plancha bien limpia, plásticos en dos tonos -el color crema ayuda a darle ese aspecto cute– y dos pantallas, una multimedia bien ubicada y otra más pequeña que hace las veces de instrumental.
En las plazas traseras mantiene su espíritu modular, con asientos plegables de distintas maneras y la posibilidad de mover el asiento hacia adelante y hacia atrás para regular el espacio entre pasajeros y espacio de carga.
No se difundieron ni las dimensiones ni la mecánica, teniendo en cuenta que el lanzamiento comercial para Europa y Japón recién comenzará el año que viene. Sí se informó que todas las versiones serán híbridas, es decir, que contarán con motores eléctricos y baterías. También habrá tecnología de seguridad inédita, como frenado de emergencia, entre otras.
Se hará en Brasil y ¿llegará a Argentina?
Si bien la marca no lo confirmó oficialmente, los periodistas brasileños que fueron al Salón de Tokio no tienen dudas de que el nuevo Fit se hará en Brasil. Pero para Argentina la situación ya no es tan sencilla.
Hace unos meses Honda informó que dejará de producir en nuestro país (mantendrá la planta de motos) y que seguirá como un simple importador. Esto cambia sustancialmente su status en nuestro mercado, ya que, al no exportar, no podrá importar sin aranceles desde Brasil. Sí podría hacerlo desde México, como ya ocurrió en el pasado.
Otra posibilidad es la de importar desde algún destino más allá del Mercosur aprovechando que las versiones híbridas pagan una mínima parte de los aranceles, aunque en ese caso -por precio y cupo-, pasará a ser un auto más de nicho.
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