Las pickups deportivas se están poniendo de moda en todo el mundo y son una buena excusa para diversificar. Una fililal de Nissan está pidiendo urgente una especie de Frontier Nismo para enfrentar a la Ranger Raptor.
Las pickups en sí no son un fenómeno en todos los mercados -en Europa tienen uso meramente comercial- pero en algunos sí, y Sudamérica es uno de ellos. Junto a Estados Unidos (donde las pickups grandes como la F150 mandan) y Australia, en Argentina, Brasil y parte de Latinoamérica el nicho de las pickups es muy jugoso y comienza a expandirse pequeños subsegmentos.
Es el caso de las versiones más potentes o más deportivas, lo que a veces es lo mismo y otras no. Lo demostró Volkswagen con su Amarok V6 Extreme, con cubiertas de perfil bajo -algo insólito para una pickup-, que se ha vendido más que bien. Hace poco Toyota lanzó su Hilux Gazoo Racing, con el mismo motor pero con suspensiones adaptadas. Según la marca, también fue un éxito y se rumorea que ya están trabajando en una versión más potente.
Ford, por su parte, traerá al mercado la Ranger Raptor (además de la F150 Raptor) tailandesa este mismo año. Ahora la noticia llega de Australia y dice que la filial local de Nissan le está pidiendo a gritos a la casa central que piensen en una Frontier deportiva, la misma pickup que se hace en Córdoba.
Stephen Lester, jefe de la división australiana de la marca, le dijo al sitio CarsGuide que siempre le están pidiendo al equipo de ingenieros globales de la marca una Frontier con «un par de cilindros más». «Me encantaría que nos den el motor de otros autos, tenemos unos motores tremendos», dijo el ejecutivo.
«Sólo puedo hacer fuerza para que el equipo de comerciales leves oiga los pedidos de nuestro grupo, no somos los únicos alrededor del mundo a los que le gustaría. Siempre mantenemos la presión, no perdemos la oportunidad de recordarles que tenemos un espacio bien grande en el vano motor donde podrían entrar un par de cilindros más…», cerró Lester, sin dejar dudas.
Recordemos que Nissan tiene su rama deportiva bajo el sello Nismo, aunque ninguno de esos modelos se ofrecen en Argentina. Lester se imagina un motor naftero en lugar de uno diésel, como forma ideal de mostrar deportividad.
Las opciones son varias, como el 3.0 V6 biturbo utilizado en el Infiniti Q50 Red Sport, de 405 CV y 484 Nm de torrque. Más arriba está el 5.6 V8 del SUV Patrol, que tiene los mismos caballos pero 570 Nm de torque. El 3.8 V6 biturbo de 570 CV del GT-R ya sería un delirio.
Por supuesto, estas no son más que especulaciones, pero claramente hay un nicho y el que no lo explote perderá oportunidades.
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