Ford presentó en Europa la nueva generación de la Ranger, la pickup que también se fabricará en Argentina en el año 2023. Por primera vez, vendrá con motor 3.0 V6 turbodiésel y otras variantes de cuatro cilindros. 

Aunque debamos esperar no menos de un año para poder verla por aquí, este es sin dudas uno de los lanzamientos del año: se presentó en Europa la nueva Ranger, que nuevamente se hará en Argentina hacia el año 2023, gracias a una inversión de 580 millones de dólares. Esta obra en la planta de Pacheco ya ha comenzado, mientras se sigue haciendo la generación actual.

El desarrollo de esta quinta generación de Ranger fue hecha en Australia y fue presentada en Europa, donde el mercado es pequeño pero liderado por Ford. Allí las órdenes comenzarán a tomarse hacia fines de 2022, con entregas pautadas para comienzos de 2023. En Argentina sólo se informó que será en 2023.

Esta nueva Ranger será también la base de la próxima generación de la Volkswagen Amarok, gracias a un acuerdo mundial entre ambas compañías. Lamentablemente, este acuerdo no se cerró en Argentina, por lo que Ford no hará la nueva Amarok en Pacheco y, si llega, lo hará importada desde Sudáfrica, la única planta del mundo que producirá la pickup mediana de Volkswagen.

Nueva Ranger

Ford Ranger XLT de nueva generación.

Los cambios son iguales a los filtrados hace ya bastante, con nuevos faros en forma de C, tecnología de LED matricial, nuevo frontal y nueva caja de carga. Estructuralmente, lo más interesante es que el eje delantero fue desplazado 50mm más adelante, por lo que ahora tiene mayor distancia entre ejes.

Además, el ancho de trocha (distancia entre las ruedas derechas e izquierdas) creció otros 50mm, lo que mejoró levemente el espacio de carga, donde ahora entra un pallet de tamaño completo. Además, Ford informó un cambio en el esquema de suspensión trasero, con amortiguadores que van por fuera de la estructura del chasis.

Ford Ranger Wildtrak. Detrás de las ruedas traseras hay un nuevo escalón.

Atrás se agregó un nuevo escalón detrás de las ruedas (Ford dice que muchos clientes pisaban en la cubierta para subir a la caja) y faros con tecnología LED. La tapa tiene nuevo sistema de apertura (no se dieron mayores precisiones) y se incluyeron algunas de las mejoras ya vistas en F-150 y Maverick, como una regla en la tapa de la caja o toma de 220V.

Hay todo un nuevo sistema de iluminación exterior que se puede activar por zonas, desde los costados (debajo de los espejos) hasta la parte trasera, pensados para quedar prendidos mientras se trabaja fuera de la camioneta. Ford incluyó un espacio para un batería extra.

Al igual que lo hizo con Maverick, Ford alentará a los consumidores a que le hagan adaptaciones al espacio de carga de la Ranger, gracias a unos ganchos que colocó y a distintos soportes. La marca está apostando a la filosofía DIY (do it yourself o hágalo usted mismo).

Por dentro

Volante a la derecha para Australia y otros mercados. Caja manual de sexta.

Por dentro se simplificó el interior y, según Ford, se mejoraron todos los materiales para parecer más un auto, con goma soft en el tablero, algo que dudamos que llegue a Argentina. Hay una nueva y enorme pantalla vertical de 10,1 o 12 pulgadas y lamentablemente Ford eliminó varios botones físicos, dejando los mínimos.

El instrumental es digital y entre los cambios más importantes hay que decir que ahora el freno de mano es eléctrico, lo que ahorra espacio. La selectora de la caja automática también cambió y se mencionaron nuevos espacios tanto debajo como atrás de los asientos traseros, aunque no se ven en las fotos. Hay cargador inalámbrico para celulares.

Un cambio que vale la pena destacar es que Ford le metió un módem a la Ranger (suponemos que con un chip nativo), lo que permite funciones a distancia a través de una app y actualizaciones remotas del sistema. Una vez más, no sabemos qué de todos esto será parte de la Ranger nacional.

Nuevos motores

La tapa tiene una regla y un espacio para colocar «sargentos».

Por primera vez, la Ranger contará con un nuevo motor 3.0 V6 turbodiésel, algo que hasta ahora sólo ofrece la Amarok en Argentina. No fueron dados datos de potencia o torque, pero podemos suponer que por lo menos estarán a la altura del actual de Volkswagen (258 CV).

Además, habrá opciones 2.0 de cuatro cilindros en línea diésel, con uno o dos turbos, una oferta que nuevamente se parece a la de la Amarok. Por último, hay un motor naftero y Ford informó que el vano motor es más amplio, para el motor V6 y para «futuras tecnologías», lo que seguramente quiere decir una Ranger híbrida.

Las cajas son tres, manual o automática de seis marchas y una automática de 10 marchas, quizás la misma de F-150 y Mustang.

Otro cambio interesante es que Ford anunció que la tracción podrá ser 4×4 conectable electrónicamente (como hasta ahora) o integral a las cuatro ruedas en forma permanente. Sigue ofreciendo reductora, al menos por lo que se ve en las imágenes. Hay, también, distintos modos de conducción.

En Argentina

Hace casi un año, el 1 de diciembre de 2020, Ford anunciaba una inversión de 580 millones de dólares par la producción de esta nueva generación de Ranger, la tercera que se hace en la planta de Pacheco. La obra ya comenzó y la camioneta llegará en algún momento de 2023.

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