El mercado de los SUV’s o crossovers del segmento B no para de crecer y ya son 17 competidores que se llevan el 10,7% de los patentamientos en Argentina. En breve pasarán a ser el segundo segmento más importante.
Siempre las presentaciones de nuevos productos son una ocasión importante para repasar números, ya que las compañías disponen de información a la que no se accede con las estadísticas de patentamientos. El jueves pasado se presentó la nueva EcoSport (ver todos los datos) y tuvimos oportunidad de repasar algunos números.
Se denomina SUV (Sport Utility Vehicle o vehículo utilitario deportivo) a lo que antes conocíamos como 4×4, pese a que ahora cada vez menos productos ofrecen tracción en las cuatro ruedas. Crossover, en tanto, se utiliza para vehículos que mezclan el aspecto de un SUV pero que no dejan de ser versiones de un auto común. La propia EcoSport es un ejemplo del primero y el Citroën C3 Aircross uno del segundo.
Tradicionalmente, en todo el mundo se vendían SUV’s de los segmentos C y D. Toyota RAV4 y Honda CR-V son los ejemplos más conocidos del primero y SW4 o Trailblazer del segundo. Pero allá por 2002, a Ford se le ocurrió crear en Brasil un SUV del segmento B para ofrecer una alternativa más barata a quienes no podían llegar a los otros productos. Así nació la EcoSport, basada en el Fiesta de entonces, y desde allí cambió la historia.
Durante largos años Ford estuvo solo en el segmento B-SUV, hasta que en 2011 Renault fue el primer en despabilarse y lanzó la Duster, de origen Dacia. En 2013 Chevrolet lanzó la Tracker y de allí en más hubo un aluvión de productos en el Mercosur y también en el resto del mundo.
Según los datos que difundió Ford, en 2017 el segmento terminará con nada menos que 17 competidores, contando a SUV’s y crossovers de todos los orígenes. Y, lo más interesante, este segmento ya es el responsable del 10,7% del total de la industria, con un impresionante crecimiento del 126% desde 2008.
Siempre según la marca del óvalo, hoy este nicho llamado Mini Utilty es el tercero en importancia, detrás de los hatchs del segmento B (vehículos como el Gol o el Onix) y los sedanes del mismo segmento (como Logan o Siena). Pero, en el corto plazo, se espera que llegue a ser segundo, marcando un auténtico cambio de tendencia. Las familias que antes compraban sedanes ahora se inclinan por las 4×4.
Mientras Ford viene usufructuando hace 15 años este segmento, marcas importantes como Toyota, Volkswagen o Fiat no tienen oferta en este nicho. Toyota es la que está más lejos ya que no tiene un plan concreto para el segmento en el Mercosur, mientras que Volkswagen sí lo tendrá a partir del año que viene con el T-Cross (ver más). Fiat, en tanto, ha logrado buenas ventas con las versiones Adventure de Palio o Idea, y tiene al Jeep Renegade como representante con otra marca.
El 2016 EcoSport cerró un año apabullante, con un 28% del mercado, seguido muy de lejos por Duster, Tracker, Honda HR-V, Peugeot 2008, Renegade y C3 Aircross. Este año las cosas se pusieron más parejas, ya que la anunciada renovación de EcoSport le hizo bajar ventas.
El gran ganador de este 2017 es Renault con la Captur, que en poquísimo tiempo ya se hizo con el 9% del mercado.
De 68 mil ventas en 2016, el segmento tiene una proyección para 2017 de 93.400 unidades, un salto importantísimo, con 7.800 unidades mensuales de promedio. Las marcas con más y mejoras propuestas son las que tendrán una mejor base para crecer en participación total.
Se espera que siga creciendo tanto la cantidad de jugadores (como Volkswagen) como la subsegmentación que inauguró Renault, con dos propuestas en el segmento (Duster y Captur). Si bien este fenómeno comenzó en el Mercosur, hoy es tendencia en el mundo. Países como Estados Unidos, que consumen vehículos mucho más grandes, ahora le están dando espacio a los B-SUV’s, impulsados por los millenials.
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