Directivos de la compañía china BYD se reunieron con el gobernador de Córdoba, quien les ofreció los beneficios de la promoción industrial. Inversión de US$ 70 millones para hacer colectivos eléctricos.

La inversión de la compañía china BYD (Build Your Dreams) sigue generando noticias. Esta empresa, a través de su pata local CTS Auto, fue autorizada por decreto presidencial  a funcionar como terminal automotriz radicada en Argentina. Ese decreto, firmado en mayo, establecía que en un plazo no mayor de 180 días corridos la empresa debía comenzar las obras de la planta.

La compañía por ahora no ha informado dónde comenzará a ensamblar ómnibus eléctricos, pero la provincia de Córdoba se metió el la pelea. Directivos de la empresa estuvieron reunidos hoy con el gobernador Juan Schiaretti, quien les ofreció los beneficios de la promoción industrial, algo con lo que cuentan empresas como FCA o Renault.

La inversión anunciada en su momento fue de 100 millones de dólares, pero según informa ahora el Gobierno de Córdoba, en la reunión se habló de US$ 70 millones. “Las negociaciones son de corto plazo y confío que podemos llegar a un final. En el primer año se estima una ocupación de algo más de 100 personas para llegar en 5 años a 500 trabajando en esta compañía”, afirmó el ministro de Industria, Comercio y Minería, Roberto Avalle.

Córdoba no es la única provincia que está en la pelea. Según contamos en esta nota, el gobierno de Salta también estuvo negociando con BYD (ver foto) y se llegó a firmar un preacuerdo. Salta cuenta con un beneficio extra: su cercanía con las minas de litio, el mineral fundamental para la producción de baterías.

No sería raro que la inversión sea desdoblada en dos unidades de negocio distintas, una con la mirada puesta en el litio y otra en el ensamblaje de los colectivos.

La foto difundida meses atrás por la gobernación de Salta. Estuvo Stella K. Li por BYD y fue recibida por el gobernador Urtubey.

De acuerdo al gobierno de Córdoba, aquí se realizaría la fabricación de los ómnibus, en tanto que las baterías y motores eléctricos vendrían de China, respetando la legislación automotriz local que implica iniciar con un porcentaje elevado de integración nacional que debe estar en un 25 y 30 por ciento. La producción se destinaría al mercado nacional dejando a criterio de cada municipio el avance y la implementación de los buses eléctricos.

Avalle, destacó que las negociaciones van por buen camino y que la semana próxima se tomaría la decisión final.

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