Argentina firmó un acuerdo con Paraguay que permitirá en unos años exportar sin aranceles. Este país es uno de los únicos del mundo que permite importar autos usados, considerados «chatarra» en otros países. 

La asociación de fabricantes de autos de Argentina, Adefa, informó que el gobierno firmó con Paraguay un nuevo acuerdo bilateral en materia de autos. En el texto se establece las bases para el libre intercambio para algunos productos automotores nuevos además de un cronograma de desgravación arancelaria para otros por los próximos dos años y alcanzar el libre comercio en el tercer año.

En la actualidad, el principal segmento que se exporta hacia Paraguay es el de pickups, que consolidarán sus aranceles al 0 %, al igual que lo tendrán los vehículos de pasajeros que hoy tienen aranceles de entre 10 % y 15 por ciento.

Únicamente los vehículos que integran una posición arancelaria más alta quedarán en un cronograma de desgravación, que llevará los aranceles a la mitad en 2020 y el restante 50% en dos años más. Para 2022 todos los vehículos ingresarán libres de arancel al país vecino.

Cómo es el mercado paraguayo

Quien haya ido alguna vez a Paraguay habrá visto la enorme variedad de su parque automotor, ya que la mayoría llega casi sin aranceles de todas partes del mundo. Toyota es una de las marcas que más se ve, acompañada de otras asiáticas como Hyundai, Mitsubishi y Kia. Las chinas también están entrando fuerte, sobre todo en vehículos comerciales.

De los autos argentinos, lo único que se ve son camionetas (mucha Hilux y SW4, aunque no todas son argentinas, algunas Amarok) y algunos autos de otra época, como el Chevrolet Corsa-Classic. Por cierto, Chevrolet ha crecido mucho en los últimos años y en 2018 lideró el mercado de 0km.

En general, para un mercado cerrado como el argentino, cuesta identificar algunos vehículos, porque nunca llegaron por aquí, como las distintas variantes del Toyota FunCargo, un derivado del Yaris de los años noventa, que se encuentra por todos lados.

El Toyota FunCargo, un auto muy común de ver en Paraguay.

En distintas «versiones».

En general, es un parque automotor bastante antiguo y ahora se acentuará más. Desde el año pasado creció mucho la venta de autos usados importados, algo que casi ningún país del mundo permite. Son autos con más de 10 o 15 años que en muchos casos tienen costo cero en sus países de origen, ya que son considerados chatarra.

Dichos automóviles, procedentes en su mayoría de países asiáticos e importados a través del puerto chileno de Iquique, se pueden adquirir en Paraguay desde 1.000 o 2.000 dólares, ya que en sus lugares de origen “tienen un costo cero, e incluso pagan (a sus propietarios) por sacarlos de las calles”, según contó el presidente de la  Cámara paraguaya de Distribuidores de Automotores y Maquinaria (Cadam) al medio Ñandutí.

Por eso el las ventas del año pasado crecieron un 9,25% respecto a 2017. El dato es que 65% de esas ventas fueron autos usados recién importados. La medida aprobada en 2011 prohibía la importación de autos de más de 10 años, pero sucesivas medidas cautelares han permitido seguir importando autos más viejos, auténticas chatarras.

Es más, algunos de esos autos se importan con volante a la derecha (en Japón, por ejemplo, se maneja por la izquierda) y se modifican en talleres informales, lo que crea mayores problemas de seguridad vial, según cuenta Víctor Servín, presidente de Cadam.

En este contexto, no será nada fácil la inserción de autos argentinos en Paraguay. Si bien hay una ventaja logística por cercanía, los precios de fábrica de los autos argentinos no son competitivos a nivel mundial.

La venta de vehículos nuevos también creció en Paraguay en 2018, en valores de un 28,9 % respecto al año anterior, gracias al impulso de la iniciativa gubernamental “Un auto para la familia”, que en 2018 ofreció un plan de financiación a 60 meses y a un 8,5 % de interés, para vehículos nuevos de tipo A (citicar, como Up, Mobi o Kwid). Argentina no produce este segmento de vehículos.

La campaña, financiada por el estatal Banco Nacional de Fomento (BNF) aumentó las ventas de esos automóviles un 40%, según Servín, a pesar de que estaba limitada a coches de hasta 50 millones de guaraníes (unos 8.270 dólares) y fabricados o ensamblados en Brasil, en virtud de un “acuerdo industrial” entre ambos países.

En total, en 2018 se vendieron en Paraguay 38.399 autos y maquinaria 0km.

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