Jim Farley, CEO global de Ford, lleva meses manejando en Chicago un Xiaomi SU7 que se trajo de China y no se quiere bajar porque está muy contento.
Xiaomi, una marca china que hace teléfonos, electrodomésticos y todo tipo de gadgets tecnológicos, llamó la atención de todo el mundo con el lanzamiento del Xiaomi SU7. Se trata de un sedán del segmento C 100% eléctrico, de precio muy competitivo y lleno de soluciones propias de un fabricante que entra al mundo de los autos por la ventana.
El CEO de Ford, Jim Farley, fue uno de los que quiso conocer de primera mano a este producto tan llamativo y se lo llevó a Chicago hacer varios meses. Sorpresa: no se quiere bajar.
Xiaomi SU7
Cuando todo el mundo estaba expectante por el primer auto de Apple, fue otra fabricante de teléfonos la que dio un golpe a la mesa. Apple canceló definitivamente su proyecto de auto eléctrico mientras la china Xiaomi dijo que le llevó sólo 3 años diseñar el suyo propio.
En lo del diseño hay que decir que tomó bastante del estilo de Porsche, uno de los competidores del SU7, junto a los modelos de Tesla. El sedán es lindo y cuenta con baterías monumentales de 150 kWh que le permiten una autonomía de mil kilómetros.
Pero todo está muy trabajado en el SU7. Cuenta con un excelente coeficiente aerodinámico (0.195), suspensiones neumáticas e independientes y un reparto del peso perfecto de 50-59% entre el eje delantero y trasero. Han hecho bien las cosas y se nota, aunque también tuvieron varias fallas tempranas, propias de un auto desarrollado de cero.
Por supuesto, más allá del «fierro», el sedán chino se destaca en toda la tecnología embarcada. Tiene muchísimos automatismos, un interior extremadamente tecnológico con un HUD (head up display) enorme, es compatible con Apple mediante AirPlay y, como monta el sistema HyperOS, también permite controlar dispositivos del hogar desde el propio vehículo. Esto en China, donde el ecosistema de Xiaomi es enorme.
El CEO de Ford está feliz
En un podcast llamado Everything Electric Show, Farley contó que encargó la importación de un Xiaomi SU7 desde Shanghai a Chicago, donde vive, y que lleva manejándolo 6 meses. Dijo que no le gusta hablar mucho de la competencia, pero que ahora le parece «fantástico».
Farley calificó a Xiaomi como «un gigante de la industria, una marca de consumo mucho más fuerte que las compañías automotrices», y esto tiene que ver con el mencionado ecosistema. Xiaomi, como otras compañías, puede generar un fuerte sentimiento de pertenencia y hacer que un usuario que ya tiene varios dispositivos de Xiaomi, adquiera más.
Y, por supuesto, con esa fórmula contar con un auto eléctrico propio puede ser un gran diferencial. Es una fórmula conocida, que la propia Tesla explotó con sus súper cargadores y techos solares, entre otras cosas.
Según The Wall Street, el CEO de Ford encargó varios autos chinos para analizar la competencia, en un momento en que tanto Europa como Estados Unidos están en pie de guerra por los autos eléctricos de ese origen. El objetivo es ver cómo las chinas están logrando precios más competitivos que los otros fabricantes.
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