Alejandro Naum, dueño del concesionario Citroën, se mostró optimista a pesar de de la caída generalizada del mercado. «2013 fue una locura de consumo, y no hay locura que dure cien años», dijo en la presentación del C4 Picasso.
En este 2014 que viene tan complicado, cuesta encontrar una voz optimista entre los referentes del mercado automotriz . Sin ir más lejos, hace unos días le preguntamos Luis Merens, de Volkswagen Argentina, cómo veía un mercado de 600 mil autos y nos dijo que ese cálculo era demasiado optimista. Por eso algo nos sorprendimos cuando, en la presentación del C4 Picasso, Alejandro Naum trató de quitarle pesimismo al análisis de las ventas. «Yo trato de verlo mes a mes y no compararlo con 2013; en abril hubo un leve crecimiento», señaló en la presentación.
Por eso nos hicimos unos minutos para hablar en exclusiva con el presidente de Naum Citroën y le hicimos una pequeña entrevista. Los detalles de la presentación del C4 Picasso se pueden leer en esta nota.
Entrevista: Alejandro Naum
Alejandro, se mostró optimista en la presentación del C4 Picasso, a diferencia de lo que se habla sobre el mercado en este 2014.
Parece ser que la noticia tiene que ser fuerte y negativa para que sea noticia.Yo creo que hay que ver el vaso medio lleno en vez de medio vacío, cualquier número que veas comparado con 2013 va a ser negativo, fue una locura de consumo, no sólo en autos sino en televisores, turismo, etc; y no hay locura que dure cien años. Siempre que hay un pico después hay una caída. Yo soy optimista porque ya hay una leve tendencia al crecimiento en la venta, 3,2% en abril respecto a marzo y lo mismo en la fabricación, aunque en este caso depende mucho de cómo le vaya a Brasil, y allá se han retraído las ventas.
Un problema adicional que hay es que si Brasil compra menos autos, también debe exportar menos a Argentina, porque nosotros tenemos que equilibrar la balanza por exigencia del Gobierno. La industria automotriz es una de las que más salida de divisas genera junto con la energía, por eso se incentiva a la industria autopartista, para que los autos tengan más partes nacionales. Por eso digo que si se llega a un mercado de más de 600 o 650 mil autos es muy bueno.
¿No han crecido demasiado las estructuras de los concesionarios en estos años?
Hacer estructura es fácil, desarmarla es muy difícil y muy caro. La estructura que tenemos nosotros da lo mismo que vendamos 80 o 150 autos, sigue siendo la misma. Si tuvieramos que hacer un achique de personal tendría que sacar dos administrativos y eso no tiene sentido. Lo que hay que hacer es vender lo más que podamos y aprovechar que tenemos una buena cobertura de los gastos fijos con la postventa y con los planes de ahorro.
¿Pasó el pánico de los clientes?
Yo creo que sí, comparada con otras inversiones, comprar un auto es la más factible de hacer, porque los departamentos están muy caros y muchos piden dólares, cuando sabemos que los dólares no existen. El comprador de hoy generalmente llega con un auto modelo 2010 y con eso ya tiene la mitad de un 0 km, y el resto lo puede financiar en cuotas fijas y en pesos, porque por suerte ahora se están acomodando los precios de los usados en relación a los nuevos. Un auto sigue siendo fácil de comprar.
¿Ha desaparecido el crédito privado?
Algo hay. Por ejemplo, hay una línea que están ofreciendo los bancos que a su vez son financiados por el Banco Nación para compra de utilitarios, en una tasa muy buena de 17% hasta 60 meses, con un tope de 100 mil pesos. O sea que con menos de 50 mil pesos te podés llevar una Berlingo a pagar en 60 meses. Quedan nichos de crédito muy convenientes.