El Onix, un producto hecho originalmente para el Mercosur, será global en su segunda generación, que llegará este mismo año. Comenzará en China y tendrá al menos cinco carrocerías distintas.
La historia del Onix debería ser escrita como un caso de estudio en la industria automotriz. Un auto popular, surgido de la crisis fulminante de 2008, cuando General Motors tuvo que recibir ayuda del gobierno de los Estados Unidos.
Mientras su rival directo Detroit lanzaba la estrategia One Ford (que implicaba que modelos similares se venderían en todos los mercados del mundo, como el Fiesta), GM tenía poco dinero para nuevos desarrollos y estaba en crisis. Así fue que nació en 2012 toda una familia de vehículos populares que se venderían exclusivamente en el Mercosur: Onix, Prisma y Spin, más el desaparecido Agile y la Montana.
El éxito del Onix y sus hermanos fue demoledor, al punto que hoy es el vehículo más vendido de toda Latinoamérica (incluido México, donde no se vende), gracias a muy buena penetración en Argentina y Brasil.
Ahora, GM acaba de informar que la marca Onix viajará más allá de Sudamérica: a partir de su segunda generación, pasará a ser una marca global, que debutará ahora mismo en China. Todo esto lo venimos contando hace tiempo en esta serie de notas.
Según el comunicado, «el rápido y constante crecimiento de este modelo captó la atención de la cúpula directiva de GM en Estados Unidos, y ha tomado la decisión de convertir el nombre de Onix en una marca de modelo global«.
Agrega: «Ocho variantes regionales con cinco diferentes tipos de carrocería serán lanzadas. Los modelos de esta nueva familia serán comercializados en 40 países diferentes, incluyendo México y otros de Sudamérica, donde la marca Chevrolet ha gozado de una posición de liderazgo en el mercado durante varios años«.
Toda esta familia de vehículos utilizará la nueva plataforma GEM (Global Emerging Markets) desarrollada junto a la china SAIC. Es decir, no será global del todo, sino sólo para los llamados mercados emergentes.
Entre esas cinco carrocerías habrá un hatch (el Onix propiamente), el Prisma o Onix sedán, la nueva generación de Tracker, una nueva pickup que podría ser un poco más grande que la Montana (apuntando a la Fiat Toro) y otro vehículo familiar para reemplazar al Spin, aunque probablemente tenga un diseño más SUV.
Las especulaciones dicen que en China se usará el nombre Onix, ya que no hay antecedentes, mientras que en Argentina y Brasil podría usarse Onix Plus (ver más) para diferenciarlo del actual Onix, que seguiría a la venta como auto de entrada de gama. La otra opción es que el Prisma pase a llamarse Onix Plus y el actual Onix persista como Onix Joy.
Sea cual fuere la elección de nombres, lo cierto es que esta segunda generación está a la vuelta de la esquina, como lo indican la cantidad de fotos espías que llegan de Brasil. Su lanzamiento sería en el segundo semestre de este año, con nuevos motores 1.0 de tres cilindros, con o sin turbo.
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